jueves, 24 de diciembre de 2009

miércoles, 18 de febrero de 2009

El meme de los

El Meme de los Sueños

Pues sí, es el primer “Meme” que recibo, de Benita (y no sé ni lo que es un “meme”), pero bueno, supongo que voy a tomarlo y a llenarlo con lo que creo que son 14 sueños que tengo. O al menos eso parece (yo es que en esto soy novatisimo).


1- Que Ibañez viva 300 años más.
2- “Que las mentiras parezcan mentiras.”
3- Que todos fuésemos poetas.
4- Que la riqueza se cuente por lo que tienes, y no se puede comprar.
5- Que el suelo este duro al saltar, pero blandito al caer.
6- Que trabajar no canse.
7- Una máquina que te duche, te vista, te afeite, te de el desayuno y LUEGO te despierte.
8- Que las cartas se vuelvan a poner de moda.
9- Que “el paraíso sea algún tipo de biblioteca”.
10- Que no haya distancia, ni hambre.
11- Que el tiempo se mida en sonrisas, y no en segundos.
12- Que mi felicidad, sea la tuya.
13- Que en mates cambien todas las X por caritas felices.
14- Que en historia nos enseñen lo que NO ha pasado.




Y ahora, para seguir este "meme", se lo paso a Elwen. Ale, te ha tocado.

sábado, 31 de enero de 2009

Espere, Maestro!

Quizás sea por mi extraña obsesión por las enfermedades mentales, quizás por el momento en el que decidí leer este libro -Cuando mi vida estaba dando un giro de 180 grados- o simplemente porque me escalofrió la veracidad del autor, pero tengo que decir que este libro me impresionó muchísimo.




Los renglones torcidos de Dios
Torcuato Luca de Tena.

Alice Gould es ingresada en un sanatorio mental. En su delirio, cree ser una investigadora privada a cargo de un equipo de detectives dedicados a esclarecer complicados casos. Según una carta de su médico particular, la realidad es otra: su paranoica obsesión es atentar contra la vida de su marido. La extrema inteligencia de esta mujer y su actitud aparentemente normal confundirán a los médicos hasta el punto de no saber a ciencia cierta si Alice ha sido ingresada injustamente o padece realmente un grave y peligroso trastorno psicológico.



Brutal novela acerca de la enfermedad mental en la que su autor, Torcuato Luca de Tena, describe con una precisión y veracidad escalofriantes un sanatorio mental desde el punto de vista de un paciente -teóricamente- sano.

Para empezar, antes de escribir el libro, y para documentarse, este escritor fingió su propia enfermedad mental y pasó 20 días en un manicomnio como uno más de los pacientes. Esto no hace si no contribuir a la fuerza de lo escrito en este libro, apoyándolo con una triste veracidad.

El libro en sí está escrito en un lenguaje simple, directo y preciso, dejando una narración cruda y realista cuya calidad se refleja en la realidad de lo que describe y en el perfectamente hilado hilo argumental, que te hace dudar desde la primera hasta la última página acerca un final, como poco, sorprendente e inesperado.

Los personajes, fieles al estilo de Luca de Tena, son realistas y relativamente poco profundos: los pacientes son casos psiquiátricamente reales, pero a la vez personas con sentimientos y personalidad, y los enfermeros y médicos, simples personajes más o menos importantes para el desarrollo de la trama.

Con la protagonista, Torcuato hace gala de una habilidad de descripción y una explicación del mundo interior digna de su libro anterior, Pepa Niebla, aunque bastante más resumida, ya que gran parte del atractivo de este libro es la velocidad con la que se desarrollan los hechos y el factor de que el libro, para la media, es corto (no más de 200 páginas).

En general, un libro impactante por su veracidad, interesante por su contenido y emocionante por su historia. Una novela que creo que todo el mundo debería leer, al menos para ser consciente de una realidad que, como muchas otras, preferimos no conocer.

Calificación: 8/10

sábado, 24 de enero de 2009

Fanatismo

A un paso estaba de no empezar a escribir nada sobre este libro, ya que tampoco me ha dicho gran cosa, pero creo que, siendo el primer (y probablemente último) autor públicamente cristiano del que leo, merece la pena comentar algo.
Esta Presente Oscuridad
Frank Peretti


El libro en si no es gran cosa: es una novelilla tipo “thriller” con una aventura que no pasa de entretenida y un desarrollo de los personajes deprimente. Por ahí nada digno de mención.


Pero lo que el autor -en su condición de fanático religioso- añade al libro es el componente Cristiano, en el que le da una parte primordial a la oración (de acuerdo con el libro es lo que “ahuyenta los demonios y da fuerza a los ángeles) y a la existencia de fuerzas sobrenaturales que controlan cada aspecto de nuestras pobres vidas y nos hacen pecar o nos dan fuerzas dependiendo del bando en el que estén.

Como libro escrito para adolescentes, lanza un montón de poco sutiles y repulsivos mensajes subliminales que hace que, cada 10 o 20 páginas, te den ganas de dejar el libro. Especial atención a la forma de describir -irónicamente- a los adolescentes mismos: Una panda de delincuentes drogadictos sin futuro únicamente salvables por la santísima religión católica. Encantador.

“- Cindy y yo abrazamos a Cristo este fin de semana.
- Si! Y echamos todas nuestras drogas por el retrete”

(Un adolescente en el libro y su novia a un sacerdote “de los buenos”)



Por otra parte, y tristemente deprimente, es la crítica que hace el autor a la meditación hinduista y budista, y a las tendencias “New Age”, poniendo ambas como nada menos que obra del diablo para controlar las mentes débiles que no rezan lo suficiente a Dios. Y luego hablan de respeto.


En general, un libro que no pasa de entretenidillo, y que critica sin motivo ni conocimiento alguno otras creencias, culturas y religiones, encima, en nombre de Dios. Una novelucha de un fanático que cree que hace bien a la sociedad pintando unos demonios que, al lado de Corelli, son poco mas que teleñecos feos y enfadados.

Lo que me vino a la mente como magnifica descripción de esta obra es “El Código DaVinci Cristiano”

Recomendado a todos aquellos que opinan que solo los paganos y Musulmanes atacan otras religiones, a aquellos de otra religión que necesitan un motivo para indignarse, y a aquellos extremistas Cristianos que necesitan argumentos para seguir creyendo lo que ya creen.

Calificación: 3/10

martes, 13 de enero de 2009

Nyu?


Pues sí. Esta vez he decidido salirme un poco del tema de los libros y hablar de una serie de anime (animación Japonesa, para los que no lo sepan) (seré friki...)
¿Por qué? Tengo varios argumentos.

En primer lugar, es algo que he avisado que iba a pasar; éste es un blog en el que se habla de libros, pero de vez en cuando saldrán temas distintos, como series, noticias, películas, religión o política.

En segundo lugar, he elegido una serie Anime porque, aunque los que no hayan visto nunca no se lo van a creer, se parecen muchísimo más a un libro que a una película:
En una película, aún con recursos ilimitados, tienes unas dos horas para presentar, desarrollar y terminar una historia completa; en un libro este tiempo es ilimitado, y se puede profundizar y dar sentimiento a la trama. Ese es el motivo por el que cada vez que se hace una película de un libro, ésta es mucho peor.

Cuando hablamos de series, este problema no existe: las más cortas no bajan de 13 capítulos (a unos 20 minutos por capítulo, 240 minutos, que son 4 horas), mientras que las más largas pasan de los 400. Esto les permite desarrollar una historia profunda, varias tramas secundarias y unos personajes originales y definidos.

¿Las hay malas? Sí, y además normalmente son esas las que llegan a nuestros oídos: Pokemon, Yu-Gi-Oh, Dragon Ball... Pero a pesar de ser dibujos animados, no siempre están orientado a los niños pequeños: Como los libros, las hay de misterio, de amor de terror, de guerra, de política, de religión... Lo que pasa es que solo las más infantiles son las que llegan a los medios Europeos.

Mi tercer motivo, y el más importante, es que esta serie me tocó como pocos libros han hecho. Me metió en su historia, y me hizo reír, llorar, temer y sentir ternura con los personajes. Cuando terminó, sentí ese vacío característico que dejan los buenos libros cuando acabas la última página, ese regusto agridulce. En la siguiente semana, no pude quitármela de la cabeza, y lo mismo pasó a todas las personas las que se la recomendé.

Por éste y los anteriores motivos (y porque me da la gana), y sin más presentación:


Elfen Lied.




Violencia. Esa es la palabra que me viene a la mente en primer lugar, probablemente porque así empieza la serie: llena de violencia y gore. Pero si no juzgas el libro por su portada, y la sigues viendo, ésta va derivando en una historia de amor, ternura, pasión, remordimiento, venganza, pasado y acción, que sube y baja como una montaña rusa.
La violencia de sangre y mutilación se torna progresivamente de física a psicológica, y crea un profundo y oscuro ambiente en el que es difícil no caer.

Elfen Lied presenta la historia de los Diclonius, una raza que se diferencia de los humanos por dos huesos en forma de “cuernos” en la cabeza, y por tener la tendencia -y el poder- de matar sádicamente a las personas. O al menos eso es lo que cree la organización que se dedica a encontrarlas, apresarlas, experimentar con ellas y suprimirlas.

La historia en sí comienza con Lucy, una diclonius que consigue escaparse de las instalaciones, y tras un accidente desarrolla una segunda e inocente personalidad, Nyu. Como Nyu conoce a un chico cuyo pasado está misteriosamente unido al de Lucy, reprimido en el subconsciente de ambos; en el de ella por una segunda personalidad y en el de él por el trauma que le causó.

Y con esto toma lugar una abrumadora historia de 13 capítulos en la que el lado más oscuro del alma humana se desvela y desgaja, permitiendo un contraste entre luz y sombra, entre bien y mal que pone los pelos de punta y revive una pregunta inicial que sigue incontestada: ¿Se nace con la maldad? ¿Se puede ser malo por naturaleza o es necesario aprenderlo de la humanidad?


No voy a decir más. Yo os enseño la puerta y vosotros, si queréis, la cruzáis.

sábado, 3 de enero de 2009

Andreas

El Juego del Ángel
Carlos Ruiz Zafón






Un escritor nunca olvida la primera vez que acepta unas monedas o un elogio a cambio de una historia. Nunca olvida la primera vez que siente el dulce veneno de la vanidad en la sangre y cree que, si consigue que nadie descubra su falta de talento, el sueño de la literatura será capaz de poner techo sobre su cabeza, un plato caliente al final del día y lo que más anhela: su nombre impreso en un miserable pedazo de papel que seguramente vivirá más que él. Un escritor está condenado a recordar ese momento, porque para entonces ya está perdido y su alma tiene precio.








No han pasado dos minutos desde que he leído la última página de este libro; sé que es un error escribir una crítica tan temprano: éstas solo son objetivas cuando la memoria sigue fresca y los sentimientos se han olvidado. Aun con lágrimas secas en mis ojos, no es el caso.

Este libro es el segundo de una serie que Zafón escribe alrededor de la Barcelona de “el Cementerio de los Libros Olvidados”. Es una historia siniestra, llena de luces y de sombras, de ilusiones y esperanzas, y venganzas y resentimiento, de misterios, de amor, de amistad y de traiciones.
Mucho más oscura que su predecesora, El Juego del Ángel habla de David Martín, un joven escritor nacido con el siglo que conoce un editor con una propuesta que le envolverá en una oscura espiral en la que, cuando se da cuenta de que debe salir, es ya demasiado tarde.

Muchas críticas he oído de este libro, la mayoría de ellas, lógicamente, comparándola con la Sombra del Viento: Algunas dicen que es mejor, otras que es peor, pero realmente no creo que sean comparables en calidad. Después de leerme ambos casi en sucesión, esto es lo que, según mi pobre opinión, los diferencia:

Lo más evidente para mí es el hilo argumental: Mientras en la Sombra del Viento se seguía la historia de muchos personajes -Daniel, Fermín, Julián, Nuria- y se daba mucha mas importancia a las historias secundarias, en El Juego del Ángel Zafón se centra en un solo personaje la mayoría del tiempo: David.
Esto, en mi opinión, esto puede quitarle un poco de diversidad a la historia y personalidad a los personajes secundarios, pero a cambio otorga, por una parte, muchísimo más desarrollo de la trama, y por otra, muchísima más profundidad al personaje principal (Recordemos que Daniel era poco mas que un testigo de la historia y que su personalidad tiraba mas bien a nula)

Otra de las diferencias reside en la historia: Mientras en La Sombra del Viento se iba desvelando una historia romántica, triste y emocionante, este libro traza una mucho mas misteriosa y tétrica, llena de interrogantes y de finales magistralmente inacabados, en los que el lector se devana los sesos intentando descubrir que es lo que realmente está pasando. Ésta ambigüedad, que se mantiene prácticamente de principio a fin sostenida por juegos mentales, es para mi uno de los mayores atractivos del libro.

En el estilo nos encontramos a un Zafón (porque Zafón es Zafón) mucho más oscuro que dramático, que va sumergiéndote una novela en la que hasta la luz son sombras disfrazadas, una novela en la que sientes la enfermedad, el miedo y la incertidumbre del protagonista, que por primera vez en muchísimos libros es una persona normal, con defectos y errores, y no un héroe, o un santo inocente, como es el caso de las demás novelas de Zafón.

Para terminar tengo que decir a los que vayan a leerlo -y hayan leído los anteriores- que se tomen la molestia de situarlo en el tiempo y de encontrar los vínculos con cada una de las otras novelas de Zafón (La Sombra del Viento, El Príncipe de la Niebla...) y los guiños que el autor va haciendo a ellas. Especial interés tiene el deducir quién es quién en la familia Sempere. Os llevareis una sorpresa.

En general, otra de las obras maestras de Carlos Ruiz Zafón, que no tiene nada que envidiar, por muy diferente que sea, a la Sombra del Viento y cuyo misterio no dejará descansar a los lectores desde la primera página que lean hasta el emocionante desenlace; con su firma característica, esta obra de Zafón es un libro que todo aquel que pueda entender va a disfrutar muchísimo.

Calificación: 9/10.







Un saludo
Sonrisas

lunes, 29 de diciembre de 2008

Todo son Ilusiones, Richard!


Ilusiones

Richard Bach


En el espacio aéreo sin nubes que se extiende entre los campos de maíz de Illinois y el azul infinito, un hombre deposita su fe en la hélice de su biplano. Para Richard Bach, escritor y pilo­to, la fe es tan real como un depósito lleno de gasolina y las chispas que saltan de los cilindros... hasta que se encuentra con Donald Shimoda, un antiguo mecánico que se describe como mesías y es capaz de lograr que las penas desaparezcan y que la imaginación remonte el vuelo.




Mi padre me enseñó este libro cuando tenía 14 o 15 años, y creo que me sobreestimó un poco: yo era demasiado pequeño y lo leí interpretándolo literalmente, así que al final no me lo tomé más que por una historia rara. Era lógico.

Ahora, con 17, volví a abrir sus páginas, y a leerlo con más tranquilidad, entendiendo lo que quería decir con cada una de sus historias, y no me arrepiento de haberlo hecho.


"No hay ningún problema que, por su magnitud, sea ineludible".


En este libro, con una misteriosa similitud a “El Principito”, el protagonista es a la vez aviador y escritor de su propia historia, pero mientras Antoine de Saint-Exupéry encuentra a un príncipe de otro planeta en el desierto, Richard encuentra a un Mesías con un solo mensaje sorprendente: Haz lo que quieras.


"Y que haríais - preguntó el Maestro a la concurrencia - si Dios os
hablara directamente a la cara y os dijera: ‘OS ORDENO QUE SEÁIS
FELICES EN EL MUNDO MIENTRAS VIVÁIS'? ¿ Qué haríais
entonces?"”


Es un libro cortito, no tardas mas de una hora en leerlo, pero tras hacerlo por primera vez, probablemente te pares el resto del dia pensando en sus palabras, o quieras releerlo un par de veces mas o, como yo, vayas a los diálogos que más te gusten y los apuntes en una hoja de papel.
Con un poco de suerte hasta puede que ayude, aunque solo sea un poco, a cambiar tu forma de ver las cosas en la vida.


- No lo sé - respondió -. No sé a dónde vamos.
- ¿Qué significa eso? Tú conoces el pasado y el futuro de todo. ¡Sabes exactamente a dónde vamos!
Suspiró.
- Sí. Pero procuro no pensar en ello.


En total, un libro que recomiendo a todo aquel que encuentre algo de interés en la filosofía, o que simplemente le guste pararse a pensar. Un libro precioso que te hace reflexionar sobre la realidad y las formas de verla, y una lectura muy agradable y emocionante de principio a fin.
Por calificación... ¿Quien soy yo para poder calificar un libro de filosofía?


Y con eso, y aun pensando que he hecho un pobre trabajo al criticar este libro, me despido.








Sonrisas







Nunca
te conceden un deseo
sin concederte también la facultad
de hacerlo realidad.


Sin embargo,
es posible que te cueste
trabajo.